¿Qué son residuos radiactivos?

Se considera residuo radiactivo cualquier material o producto de desecho, para el cual no está previsto ningún uso, que contiene o está contaminado con radionucleidos en concentraciones o niveles de actividad superiores a los establecidos por las autoridades competentes: Ministerio de Industria y Energía, previo informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)”.

¿Cómo se clasifican los residuos radiactivos?

En España, los residuos radiactivos se clasifican considerando la gestión final que se les debe realizar. Esta clasificación se basa en la actividad inicial de los residuos y el período de semidesintegración (tiempo que tardan los isótopos radiactivos en reducir su actividad a la mitad) de los radionucleidos que contiene mayoritariamente.

Los residuos radiactivos en el territorio español se clasifican de la siguiente manera:

  • Residuos de muy baja actividad (vida corta y media)
  • Residuos de muy baja actividad (vida larga)
  • Residuos de baja y media actividad (vida corta y media)
  • Residuos de baja y media actividad (vida larga)
  • Residuos de alta actividad

Estas 5 clasificaciones, se agrupan en tres categorías principales

Residuos de Baja y Media Actividad (RBMA)

Los RBMA son aquellos cuyos radionucleidos mayoritarios tienen un periodo de semidesintegración inferior o igual a  30 años (vida corta o media). El nivel de radiactividad de estos residuos se sitúa en general entre algunas decenas de Bq/g (bequerelios por gramo) y unos 1000000 Bq/g.  Su radiactividad normalmente decae en algunos cientos de años, pudiendo ser comparable a los niveles de la radiactividad natural existente en la superficie de  la tierra.

Sus características mas representativas son: Tienen una actividad específica baja, poseen emisores beta-gamma y emisores alfa en concentraciones muy bajas, su período de semidesintegración es menor de 30 años y no generan calor.

Los residuos de Baja y Media Actividad (RBMA) pueden ser herramientas, ropa de trabajo, instrumental médico y otros materiales utilizados en algunas industrias, hospitales, laboratorios de investigación y centrales nucleares.

Residuos de Muy Baja Actividad (RBBA)

Los RBMA son aquellos que solo alcanzan unas concentraciones de actividad del orden de 10 a 1000 Bq/g.. Decaen suficientemente tras un período temporal de almacenamiento inferior a 5 años, después del cual, son declarados exentos.

En su mayoría, este tipo de residuos son generados en el desmantelamiento de las centrales nucleares.

Sus principales características son: Muy baja actividad específica y menores requisitos para su gestión.

Residuos de Alta Actividad (RAA)

Los residuos de alta actividad son aquellos que contienen unas considerables concentraciones de radionucleidos o isótopos radiactivos, (emisores alfa de vida larga y/o emisores beta-gamma) con periodos de semidesintegración superiores a 30 años, y dada su elevada actividad específica, pueden generar calor por efecto de la desintegración radiactiva, llegando a estar activos durante miles o decenas de miles de años.

Este tipo de residuos denominados así, lo constituyen no obstante esencialmente el combustible gastado que se genera durante la operación de las centrales nucleares y son aún elementos combustibles. Además, una pequeña cantidad de ellos está representado por materiales procedentes del reprocesado del combustible gastado de la central Vandellós I.

Las principales características de los residuos radiactivos de alta actividad: Son emisores alfa en concentraciones apreciables, tienen un periodo de semidesintegración mayor de 30 años y pueden generar calor.